Los
trabajos vulnerables, por lo general, tienden a ser empleos con horarios prolongados, donde el empleador tiene un poder desmedido sobre el empleado, es decir, generalmente el
trabajo vulnerable es consecuencia de una situación de abuso en donde el empleado, ya sea por una situación legal específica o por no tener capacidades para defenderse, no puede revertir la situación de abuso.
(adaptado del
II Seminario internacional nuevos desafíos de desarrollo en América Latina, consultado el 24-12-2007)
Prácticas de trabajo abusivas
Generalmente la primera característica del
trabajo vulnerable es la situación ilegal del trabajo: emplear a una persona en un trabajo ilegal o que no esté reglamentado por un contrato es de por sí una práctica abusiva que coloca al empleado en una situación de vulnerabilidad. Por lo común, los trabajadores vulnerables suelen ser de las clases más bajas y de poca instrucción, por lo que el trabajo presente que tienen es la única opción que tienen para sustentarse, y por eso muchas veces se aceptan condiciones laborales abusivas, como largas jornadas laborales y realización de actividades riesgosas para la salud.
Dado que en muchos países no hay una legislación que verdaderamente proteja al trabajador no se puede decir que todas las formas abusivas de trabajo son ilegales, puesto que muchas veces el
trabajo vulnerable se tiene dentro de las ocupaciones que se pueden realizar legalmente.
(adaptado de la Organización Internacional del Trabajo (OIT),
Informe de la Comisión de la cooperación técnica, 1999 y de Alzate, L.,
El trabajo doméstico, Central Unitaria de Trabajadores (CUT), 2005, consultados el 20-04-2009)
Trabajadores vulnerables
La categoría de trabajadores vulnerables contiene tres grupos socio-ocupacionales: las empleadas domésticas; los trabajadores no remunerados (familiares y no familiares); y el resto de asalariados en el sector privado cuyas relaciones laborales se caracterizan por su desregulación. En este tercer grupo se diferencia entre asalariados agrícolas y no agrícolas. O sea, la categoría de
trabajo vulnerable agrupa a los trabajadores más desfavorecidos.
(adaptado de Pérez, J., et ál.,
El orden social ante la globalización. Procesos estratificadores en Centroamérica durante los años noventa, Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), 2003, consultado el 15-11-2010)
Categorías de las peores formas de trabajo
La OIT ha estipulado las peores formas de trabajo en las que se puede emplear un ser humano, en donde se incluye a todas aquellas formas de trabajo que sean esclavizantes, forzadas o que estén relacionadas con explotación sexual y otras actividades ilícitas, especialmente si estas labores son realizadas por niños. De la misma forma se considera
trabajo vulnerable toda aquella ocupación que constituya un riesgo para la salud del empleado, ya sea de forma inmediata o a largo plazo.
Por otra parte, los empleados que se ocupan en
empleos vulnerables suelen tener salarios muy bajos y largas jornadas laborales que les impide ahorrar o buscar mejores oportunidades de trabajo, con lo cual se crea un círculo vicioso en el cual los más desprotegidos no pueden escapar de sus condiciones de vida.
(adaptado del Ministerio de Trabajo de Colombia,
III Plan nacional para la erradicación del trabajo infantil y la protección del joven trabajador 2003-2006, consultado el 15-11-2010)
