«En primer lugar, un empleo es precario cuando tiene un reducido horizonte de tiempo o cuando existe un gran riesgo de pérdida. En segundo lugar, cuando existen pocas posibilidades para los trabajadores de controlar las condiciones de ese empleo. En tercer lugar, cuando no existe protección o cuando la seguridad social no está garantizada. Finalmente, un empleo es precario cuando los bajos ingresos están relacionados con condiciones de pobreza. El concepto de precariedad comprende entonces las dimensiones de: inestabilidad, carencia de protección, inseguridad, así como debilidades sociales y económicas. No es una sola dimensión, sino la combinación de los diversos factores la que determina el carácter de un empleo precario
. Sin embargo, puede afirmarse que la presencia de uno solo de estos rasgos alcanza para caracterizar un trabajo como precario».
(Organización Internacional del Trabajo (OIT),
Trabajo precario,
Glosario de conceptos fundamentales, 2005, consultado el 15-03-2011)